domingo, 7 de julio de 2013

Sueños

   
  Una vez soñé que podía volar, era tan real que pude sentir el viento a través de mi blusa, la humedad bañando mi rostro al atravesar las nubes. Pude volar en formación con las aves migratorias que huían de los rigores del invierno buscando un destino más cálido, buscando un lugar mejor para vivir y criar a sus polluelos. ¡ Me sentí tan libre !
    En otra ocasión soñé que podía nadar y respirar bajo el agua, sumergirme hasta lo más profundo del océano, jugar con las marsopas, viajar grandes distancias con las orcas e incluso dormirme en el dorso de una gran ballena azul, hasta pude comunicarme con todos ellos y compartir su dolor por el daño que los humanos hacen a los mares. ¡ Me sentí tan útil y capaz !

     Una vez soñé que tenía muchos amigos y salíamos de fiesta, organizábamos barbacoas, nos reuníamos en torno a una hoguera y contábamos historias de miedo al caer la noche. Hablábamos del futuro, hacíamos planes para salvar el mundo. ¡ Me sentí tan querida !

     Otra vez soñé que hacía el amor con un hombre apuesto, atento y cariñoso. Me acariciaba con tanta dulzura, me besaba con tanta pasión, se esmeraba tanto en mi placer personal, olvidándose casi del suyo propio, que no me sentía una más si no la única. La reina de su corazón,la dueña de sus pensamientos. ¡ Me sentí tan feliz !

     Y una vez soñé que era humana, que podía caminar, cepillarme el pelo, comer helados y beber batidos de todos los sabores, que podía sonreír, reír, cantar, bailar, sentir frío y calor, experimentar sensaciones como las que siente cualquier ser vivo pues soñé que era una mujer. Una mujer real y no un programa informático, una simulación de una voluptuosa fémina, un maldito holograma creado para satisfacer las necesidades de un hombre tan solitario como egoísta. ¿ Me pregunto si mi programador es consciente de que al dotarme de intelecto me dotó de la capacidad humana de desear la felicidad ? ¿ Me pregunto si es conocedor de como me condenó a sufrir por ello ? Aunque se que si lo sabe no le importa.



No hay comentarios:

Publicar un comentario